Época: Normandía
Inicio: Año 1942
Fin: Año 1944

Antecedente:
Victoria aliada en el mar

(C) Virginia Tovar Martín



Comentario

En su incansable búsqueda de nuevas presas, los submarinos alemanes descendieron al Atlántico Sur, extendiendo sus ataques a la marina mercante brasileña, que colaboraba con la aliada. Brasil declaró la guerra a Alemania el 22 de agosto de 1942, en respuesta a estas agresiones. Fue una desacertada política la de Berlín en este asunto: unos pocos buques le pusieron en guerra con Brasil, que si bien poco intervino en ella sí cedió en cambio sus puertos y aeropuertos a buques y aviones aliados, dificultando mucho la caza submarina en el Atlántico Sur.
Pero el mando de los submarinos alemanes no tenía tiempo para darse pésames por sus errores. En aquellos meses cruciales del verano-otoño de 1942, se estaba decidiendo la guerra en África, en la URSS y en el mar. En junio había establecido el record absoluto de hundimientos: 834.196 toneladas de buques: 24 meses más a ese ritmo hubieran dado la victoria a Alemania. Tampoco fueron magras las cacerías del Eje en los meses siguientes: cuatro meses consecutivos por encima del promedio de 600.000 toneladas: y en noviembre, de nuevo, volvían a rebasar las ochocientas mil.

Las consecuencias se dejaron notar fundamentalmente en Gran Bretaña, que pese a todo el apoyo que podían darle los Estados Unidos, recibió ese año 34 millones de toneladas de mercancías, esto es, 2/3 partes de las que arribaban a sus puertos en 1939. En su obra The War at Sea, el capitán de navío Roskill dice: "A mediados de diciembre no quedaban ya en los depósitos comerciales británicos más de 300.000 toneladas de carburante, cuando nuestro consumo mensual ascendía a 130.000 toneladas. El Almirantazgo, por su parte, se reservaba un millón, del que se podía disponer en caso de extrema necesidad; pero si se dejaba disminuir demasiado este depósito de la Marina la flota podía queda inmovilizada".

Por su lado, Doenitz también tenía motivos de preocupación: cerraba el año con la cifra más baja de hundimientos: 75 buques con un registro bruto de 351.131 toneladas .... ¿se le estaba esfumando su sueño de ganar la guerra en el mar? Un hombre tan inteligente como él debía contemplar con profunda inquietud ese descenso de las cifras de hundimientos, pero aún sería más alarmante la cantidad de pérdidas entre sus submarinos: 20 el primer semestre del año y ¡67! en el segundo. Total 87 submarinos, esto es, más de los que tenía operativos a comienzos de año (20).

Cierto es también que había recibido cuantiosos refuerzos, tanto que el 31 de diciembre disponía de 212 sumergibles, pero cada vez las tripulaciones eran más bisoñas y la gran incógnita siempre estaba presente: ¿hasta cuando podría mantener aquellas pérdidas Alemania?